Ancelotti tardó menos de un mes para remarcar que su plantilla real registra un total de 14 jugadores. Y sí, esta gestión de la temporada ha funcionado de maravilla durante seis meses. El momento no podía ser más idílico: Vinicius explotó su versión más completa y madura, Benzema se erigió como gran capitán, el centro del campo de toda la vida al nivel de toda la vida y Courtois marcando la diferencia.

El Real Madrid dominaba el panorama nacional y sumaba de tres en tres incluso por inercia. Además, el contexto externo resultaba inmejorable: Barcelona y Atlético de Madrid atravesaban diferentes crisis y al Sevilla, único equipo capaz de seguir el ritmo de los blancos, se le han acumulado las lesiones y los problemas para ganar lejos del Pizjuán.

Sin embargo, desde esta casa, ya adelantamos las consecuencias que conlleva un sistema de rotación tan arriesgado. De hecho, es imposible que Ancelotti no conociese el antecedente reciente. El año pasado vimos como el Madrid, con Zidane en el banquillo, acusó el desgaste físico y la saturación del juego en el tramo final y más importante.

Si bien es cierto que esta campaña parece que han amarrado la Liga gracias al colchón generado en la primera vuelta, las sensaciones para esta última fase no son positivas; es más, se asemejan a lo ocurrido en la 20/21. Ancelotti juega con fuego y en el Bernabéu existe una gran oportunidad y un bonito reto con la Champions.

A pesar de que el probable título liguero avala al técnico italiano, el papel del Madrid en Europa pesa de cara al futuro. El vestuario evitó los efectos de la humillación experimentada ante el Barcelona por la situación favorable que vive en las dos competiciones; pero deben andar con cuidado. Cómo se acabe el curso cobra más relevancia ahora, pues la realidad es que, tras tanto jolgorio, la ‘Xavineta’el proyecto de futuro en Can Barça— empieza a incomodar en la capital.

De momento, los de Ancelotti padecen algunos de los síntomas de hace 365 días. El factor principal reside en la dichosa rotación y la escasa confianza otorgada en la mayoría de la plantilla. Seguramente motivos no le falten; no obstante, las piezas claves presentan un excesivo cansancio a días de los cuartos de final de UCL. Es el riesgo que el italiano ha decidido tomar.

Quizá Ancelotti no confíe demasiado en el devenir de su equipo en este torneo, su torneo; pero, sin duda, este planteamiento limita sus posibilidades.

Imagen principal: Twitter @realmadrid.


En ELXIIDEAL tenemos una amplia oferta para insertar la publicidad de tu negocio en nuestra web y redes sociales.

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí