Durante el verano de 2019, los Oklahoma City Thunder veían cómo su proyecto se deshacía con los traspasos de Paul George a los Clippers y de Russell Westbrook, probablemente el jugador más emblemático de la historia de la franquicia, hacia los Houston Rockets. Se preveían tiempos difíciles, pero cuatro años después, la realidad es muy diferente.
Una reconstrucción modelada por Sam Presti, el arquitecto de esta franquicia que colecciona rondas de Draft (tienen 20 primeras rondas hasta 2029), ha situado a los Thunder como uno de los conjuntos más interesantes para estos próximos años.

Con un equipo joven e inexperto (el jugador con más temporadas en NBA fue Dario Saric, con seis) comandado por Mark Daigneault, los Thunder fueron una de las sorpresas agradables del año.
El conjunto de Oklahoma City Thunder finalizó el curso con un balance de 40-42 que le permitió acceder al Play-In con el décimo puesto de la conferencia oeste. Después de vencer en el primer encuentro a los Pelicans, los Thunder perdieron ante los Minnesota Timberwolves en el partido que daba acceso a los Playoffs.
A pesar de ello, la temporada de OKC ha sido brillante, puesto que, a la vez que desarrollaban su ‘young core’, el equipo dio un paso al frente para ser un conjunto competitivo en la liga.

Shai, Giddey, Williams y Holmgren: los cuatro jinetes de OKC:
OKC ha formado un núcleo excepcional liderado por cuatro jóvenes llamados a dominar la NBA. El principal exponente de la franquicia es Shai Gilgeous-Alexander (25 años), que se ha destapado como uno de los mejores jugadores y anotadores de la NBA durante este curso.
El canadiense, que llegó como parte del traspaso que envió a Paul George a Los Ángeles Clippers, ha firmado una temporada memorable. Durante este curso, el dorsal ‘2’ de los Thunder ha promediado 31,4 puntos; 4,8 rebotes y, 5,5 asistencias por encuentro. Estas estadísticas le han permitido al base ser All-Star por primera vez y, además, estar presente en el First All-NBA junto a Doncic, Tatum, Antetokoumpo y Embiid.
Pero los Thunder no son únicamente Shai. También cuentan en sus filas con varios jugadores con una proyección envidiable. Uno de ellos es el compañero de ‘backcourt’ del canadiense, Josh Giddey (21 años).

El escolta australiano, escogido en el sexto puesto del Draft de 2021, destaca por ser un jugador muy completo, como demuestran sus estadísticas de esta temporada (16,6 puntos; 7,9 rebotes; 6,2 asistencias). El principal ‘pero’ del escolta era el porcentaje desde la línea de tres, aunque este año ha progresado en esa faceta (del 26,3% en su año ‘rookie’ al 32,5%). En definitiva, el compañero de ‘backcourt’ perfecto para Shai.
Además, durante el pasado Draft, los Thunder escogieron en el pick 12 al alero Jalen Williams (22 años). El jugador nacido en Denver ha sorprendido con su juego y madurez en la pista, hasta el punto de acabar segundo en las votaciones al Rookie del Año, por detrás de Paolo Banchero.
Llegado desde la universidad de Santa Clara, Williams es un complemento ideal para la posición de tres o cuatro en estos Thunder. Su seguridad en el tiro (52% en tiros de campo y 35,6% desde el triple) y buenas decisiones con balón (3,3 asistencias este curso) muestran un jugador sólido que puede crecer una barbaridad en la liga.

Por último, el cuarto jinete de este equipo es el pívot Chet Holmgren que, tras un primer año en blanco por lesión, debutará esta temporada tras ser escogido por los Thunder en el segundo pick del pasado Draft.
Un ‘unicornio’ de 2,13 metros de altura y 2,28 de envergadura que ya ha demostrado en su debut en la Summer League (15 puntos, nueve rebotes y cuatro tapones) que está preparado para la NBA y, por qué no, ser el principal rival de Wembanyama en la carrera por el Rookie del Año.
Además de estos cuatro jugadores, los Thunder cuentan con un nivel medio de plantilla más que interesante. Los Dort, Jaylin Williams, Saric, Oladipo (firmado en esta agencia libre) o Wallace (elegido en el número 10 de este Draft) son complementos indispensables para que el conjunto de Oklahoma City Thunder continúe con una progresión que parece no tener techo.
Imagen principal: @okcthunder.