La Premier League ha traído de vuelta a una de sus leyendas. Steven Gerrard ha dado un paso adelante en su carrera como entrenador tras fichar por el Aston Villa. Un nuevo y difícil reto para el icono del Liverpool, que deberá levantar el ánimo de un club a dos puntos del descenso.
El rendimiento del Villa ha distado mucho de lo que se podía esperar a principios de temporada. La marcha de Jack Grealish, su líder espiritual y futbolístico, puede ser un motivo importante.
Sin embargo, la junta directiva invirtió en tres jugadores para compensar, precisamente, esta baja: Danny Ings, Emi Buendía y Leon Bailey. Ninguno ha actuado a su máximo nivel, pero el caso del último es el más sangrante: apenas dos partidos como titular y malas sensaciones.
Nadie pone en duda las capacidades de estos jugadores, los cuales brillaron en sus equipos anteriores. Por eso, la afición espera que Gerrard pueda exprimir todo su potencial.
El trabajo del técnico inglés con el Rangers ha generado críticas positivas y es bastante estimulante pensar qué será capaz de lograr en Inglaterra. El curso pasado ganó la Scottish Premiership (liga) invicto, y el propio Villa destaca su estilo de juego atractivo y ofensivo.
Hay quien piensa que Gerrard ha pecado de ansioso al abandonar Escocia con la temporada en marcha. También hay dudas en relación a su preparación real para dirigir en la mejor liga del mundo. Frank Lampard es un buen ejemplo para calibrar expectativas, pero la pelota es quien tiene la última palabra.
Imagen principal: Twitter @AVFCOfficial.
En ELXIIDEAL tenemos una amplia oferta para insertar la publicidad de tu negocio en nuestra web y redes sociales.