Ya es oficial. Gareth Bale es nuevo jugador del Tottenham Hotspur, eso sí, el galés llega en calidad de cedido por una temporada a cambio de 22 millones de euros. De esta forma, el Madrid se ahorra sus 17 millones de sueldo anual. El jugador deberá regresar al conjunto blanco la próxima temporada para cumplir su último año de contrato a no ser que el Madrid le encuentre salida el próximo verano.

Bale regresa al club que le lanzó al estrellato y propició su fichaje por el Madrid hace siete temporadas. Zidane no cuenta con él desde hace mucho tiempo y, sorprendentemente, la actitud de Bale ha cambiado y ha aceptado su salida, eso sí, sin perder un euro de sueldo. En las últimas temporadas el galés ha aceptado un rol secundario en el equipo y se ha mostrado indiferente ante sus continuas suplencias. «Gales, golf, Madrid», rezaba la bandera con la que el jugador celebró la clasificación de su selección para la Eurocopa el pasado mes de noviembre. Ahora habrá que ver si el fichaje por el Tottenham cambia sus preferencias o si el club inglés se sitúa en el último lugar de la lista.

Bale estará a las órdenes de Mourinho, un entrenador que siempre ha mostrado interés por el galés y cuyo objetivo será recuperar su mejor nivel. Todavía con 31 años, Gareth tratará de cumplir las expectativas en una liga donde el físico, velocidad y potencia marcan la diferencia. El Madrid respira aliviado y el Tottenham le recibe con los brazos abiertos. 

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