El Atlético de Madrid visitaba la nueva casa del Levante en esta nueva liga post covid, La Nucía, donde el conjunto colchonero podía adelantar al Sevilla y alcanzar la tercera plaza si conseguía la victoria ante un rival que, tradicionalmente, se le ha atragantado al equipo del cholo a domicilio. Por su parte el Levante, con la salvación prácticamente sellada, quería mantener su buena dinámica después del regreso de LaLiga, donde no ha perdido en sus primeros tres partidos, para seguir mirando arriba.

El Atlético empezó en modo asedio, acechando la portería de Aitor Fernández. El Cholo hoy devolvió la titularidad a Koke, Saúl y Lodi, que descansaron contra el Valladolid, y dejó en el banquillo a Joao Félix y Morata. En el conjunto local, la novedad fue la suplencia de Campaña. Ambos planteles presentaron un idéntico sistema de 4-4-2.

Los rojiblancos, mucho más enchufados desde el principio, no tardaron en adelantarse: Arias filtró un pase entre líneas para Marcos Llorente, que se dio la vuelta con un excelente control para zafarse de su marca, y superó la salida de Aitor con la colaboración de Bruno González, que metió el balón en su propia portería. Jugadón del todoterreno del Atlético, el jugador más en forma de los del Cholo, radiante de confianza y al que ahora mismo le sale todo: 0-1.

El Levante no consiguió salir de su campo en toda la primera mitad, mermado en la zona de creación donde claramente faltaba Campaña. El Atlético tampoco levantó el pie del acelerador y probablemente mereció algún gol más en una gran primera mitad del equipo del Cholo.

La segunda parte siguió el mismo guion, con un Levante sin ideas en tres cuartos e incapaz de encontrar espacios entre líneas, mérito de la buena disposición del Atlético. El Cholo efectuó un triple cambio a la hora de juego para inyectar oxígeno en su equipo y dio entrada a Joao, Giménez y Correa. Paco López metió a Miramón y Morales por la derecha para ganar profundidad y a Campaña en el centro para dirigir las operaciones. Con estas modificaciones, el Levante se iba al ataque y el Atlético tenía más espacios para matar a la contra.

Con los cambios se sucedieron las llegadas en ambos lados y el partido se colocó en el alambre entre el empate o la sentencia. El Atlético perdonó con dos ocasiones claras de Joao y Koke, y el Levante, con un Toño estelar por la izquierda, tuvo la más clara con un centro del lateral y un cabezazo de Mayoral que se marchó rozando el palo. El marcador no se movió y el Atlético terminó pidiendo la hora para sumar tres puntos fundamentales que le hacen adelantar al Sevilla y colocarse en la tercera plaza.

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